CAPÍTULO VII: Cuenta regresiva
AVISO: Estas misiones son más entretenidas y me tomé más tiempo haciéndolas. Las personas que no responden a tiempo están fuera. También juntaré a Alex [MENTION=58406]quiqueenri[/MENTION]) y Karla [MENTION=4878]Overly.[/MENTION]) con Albert [MENTION=27474]Teos[/MENTION]). Lo único que necesisto es que intercambien diálogos mediante MP con preguntas que le harían a los demás, y las respuestas que entregarían y luego lo escriban, las preguntas que le harán a John me las hacen a mí. Esto les dará más libertad en el capítulo, siendo capaces de superar las reglas de libre albedrío.
CONSEJOS: Sean valientes (?) En la siguiente misión, la mayoría debe estar en el Empire State, y ahí se realizará una misión grupal, pero las respuestas de todos deben ser individuales. Yo haré todo el trabajo, así que no se preocupen, pero deberán trabajar en equipo y es por esto que les daré más tiempo.
MISIONES:
Albert y Karla (Residencia: Manhattan)
Skov (Residencia: New York)
Nio (Residencia: San Francisco)
Alex (Residencia: New York)
Will (Residencia: En el avión)
Trek (Residencia: En un cybercafé en New York)
Sophie (Residencia: En la NYU)
Ahí tienen cochinos. Tienen cinco días para responder.
[MENTION=41932]Nio.[/MENTION] [MENTION=47065]Captain Rakhan[/MENTION] [MENTION=57495]Skov[/MENTION] [MENTION=27474]Teos[/MENTION] [MENTION=4878]Overly.[/MENTION] [MENTION=58406]quiqueenri[/MENTION] [MENTION=25548]Poke*planta[/MENTION]
AVISO: Estas misiones son más entretenidas y me tomé más tiempo haciéndolas. Las personas que no responden a tiempo están fuera. También juntaré a Alex [MENTION=58406]quiqueenri[/MENTION]) y Karla [MENTION=4878]Overly.[/MENTION]) con Albert [MENTION=27474]Teos[/MENTION]). Lo único que necesisto es que intercambien diálogos mediante MP con preguntas que le harían a los demás, y las respuestas que entregarían y luego lo escriban, las preguntas que le harán a John me las hacen a mí. Esto les dará más libertad en el capítulo, siendo capaces de superar las reglas de libre albedrío.
CONSEJOS: Sean valientes (?) En la siguiente misión, la mayoría debe estar en el Empire State, y ahí se realizará una misión grupal, pero las respuestas de todos deben ser individuales. Yo haré todo el trabajo, así que no se preocupen, pero deberán trabajar en equipo y es por esto que les daré más tiempo.
MISIONES:
Albert y Karla (Residencia: Manhattan)
Spoiler:
El tema de la muchacha, sin dudas, extrañaba a Albert. El hecho de que hubiera abandonado la búsqueda dejaba algunos clavos sueltos que hacía a Albert tener más cuidado en las decisiones que tomaba. La armadura ya estaba finalizada y gracias a los poderes de G, podrían resistir lo que parecía ser un atentado. El problema era reconocer de dónde venía. ¿Era del gobierno? ¿Era de un enemigo en común? Estas preguntas rondaban la cabeza de los tres, que después de ese día, parecían conocerse de toda la vida. El cansancio y todo el tiempo que llevaban, todo lo que habían recorrido, todo parecía tan repentino. Como un parpadeo.
Albert mencionó lo de la bomba. Karla y G se quedaron en silencio. No era incómodo, si no era la afirmación de que necesitaban, de alguna forma, conseguir la mayor información posible.
Albert decidió usar sus poderes para investigar, y logró encontrar la información que necesitaba en la NSA. Se trataba de una investigación de hace dos años, en la cual se investigaba el genoma humano en el cual se encontraron mutaciones, y entre ellos aparecía el científico el cual también la llevaba y vivía en San Francisco. Finalmente, el científico decidió dejarlo y dedicarse a la educación, pero la información no era clara en el asunto. Albert indagó más aún, y encontró lo que buscaba, el profesor dejó la investigación por el objetivo de esta: encontrar el método de adquirir la habilidad genética de otra persona, con la meta de lograr crear personas así para trabajar para el gobierno. Según el artículo, al científico le pareció una grosería, ya que para adquirir una habilidad, la persona debía estar muerta y ser investigado el cerebro. Aún así, al parecer, el científico había seguido sus investigaciones genéticas en la universidad y había sido constantemente vigilado por el gobierno. Lamentablemente, no pudo tener más información, ya que al parecer el profesor y científico no usaba la web para mantenerse al tanto, la había dejado.
Mientras, G respondía las dudas de Karla.
—¡No sé nada más, Karla! Solamente vine aquí por un trabajo, sé de mi poder hace un tiempo. Han estado persiguiéndonos, eso lo sé, puesto que antes que viniera aquí estuve en riesgo. Pero pensé que había acabado, al parecer, estaba equivocado.
Karla indagó aún más.
—Te puedo decir que tienen dinero y recursos. Los suficiente para saber todo sobre nosotros, pero no sé lo que realmente buscan.
Aunque gracias a su investigación, Albert ya lo sabía. Aunque para ambos, aún quedaban ciertas partes confusas.
G respondió ante la pregunta de Karla sobre habilidades.
—Lo siento, soy el único hasta el momento. No he conocido a nadie más con una habilidad como la mía.
Pero antes de poder responder la última pregunta de Karla, G, sorprendido le comentó si conocían a la persona que estaba ahí. Karla y Albert, atemorizados, hicieron un paso atrás ante la nueva presencia, hasta que notaron que era Trek.
—¿Trek? —le dijo Albert— volvemos a encontrarnos.
Karla, en silencio, le observaba. Dio un paso adelante, e inteligentemente le ofreció la mano. Trek le sonrió y la estrechó.
—Siempre tan inteligente, Karla —mencionó.
Karla, mediante esta técnica pudo recorrer absolutamente toda la vida de Trek. Su hermana, Skov, su vida de adolescente y la actualidad cuando apenas tenía quince años, sus problemas con los padres, sus discusiones y pudo presenciar cómo New York era destruído. Cada segundo de su vida, lleno de amarguras y dolor. También se conoció a sí misma, se pudo ver desde la otra perspectiva, cuando Trek la saluda y cómo ambos desarrollan una amistad en medio del caos de New York. También conoció el mundo del futuro: ese mundo en el cual los héroes eran terroristas, y eran perseguidos por la gente, siendo culpados por la muerte del 0,07% de la población mundial. Karla ahora podía recordar cualquier cosa sobre Trek.
—¿Por qué volviste? —preguntó Albert.
—No he vuelto —respondió— fue otro yo quien lo hizo, en otra línea temporal seguramente. Vine aquí porque mi propio yo me lo pidió. Según entiendo, aún el día de New York no sucede, y aún Karla ni tú me conocen. Pero yo los conozco, Albert, sé que Karla ahora sabe todo sobre mí.
—¿Te puedes quedar? —Karla había visto que Trek tenía algunos problemas, luego del día de New York, para realizar los viajes. No entendía la razón, pero al parecer, algunas habilidades se habían debilitado luego de ésto.
—Sí, puedo hacerlo —le dijo a Karla, mientras avanzaba y saludaba a G, estrechandole la mano— sé quién eres, y te deseo lo mejor.
Karla había visto que en la línea de "ese" Trek, G se había sacrificado, había dado su vida para que Trek absorbiera su habilidad y detuviera a lo que era...
—¡¿Qué?! —exclamó Karla— ¡No es una bomba, es una persona!
Albert la miró, perplejo, mientras G parecía cada vez más confudido.
—¿Qué significa eso? —preguntó G.
—Sé que lo sabes, Karla, pero quiero explicárselos de todas formas. Te ahorraré el tiempo de hacerlo a Albert, y cualquier pregunta sobre mí, mi futuro, o alguna habilidad, la podrás hacer a tu memoria. En mí línea temporal, que es extremadamente similar a la suya, todos fuimos traídos por el profesor de San Francisco. Pero al parecer, eso no sucederá. El nos explicó el por qué de nuestras habilidades, cosa que ustedes deben saber ya, y de cómo mirando el cerebro de otro se puede adquirir. El gobierno ha estado atrás de la gente con habilidades por años, han estado sobreviviendo entre nosotros, mientras son cazados por ellos. El profesor no estaba de acuerdo y se alejó con la iniciativa, y nos ayudó a nosotros. Nos contó todo, y estuvimos preparados. El atentado del hombre bomba, es un cautivo de ellos, un hombre que no llegué a conocer —argumentó— pero tiene la habilidad de ser radioactivo. Para hacerlo enojar, asesinaron a su esposa al frente de él, causando finalmente una explosión enorme, que no fuimos capaz de detener. No teníamos a G, había sido cazado por los del gobierno, y Albert... había también caído. Karla, Skov y yo eramos los últimos, y nos prometimos que intentaríamos rehacer todo esto, volver al pasado, pero luego de que todo sucedió nos dimos cuenta de que era imposible. No había salvación para nosotros, pero sí para ustedes. Ahora, estoy solo. En el futuro, perdí comunicación con todos los demás hace años. Las personas con habilidades son buscadas, la gente las odia, puesto que cree que ellos fueron los causantes de esto. El gobierno sabía que nosotros eramos una revolución y tenían que detenernos antes de que comenzara. Un otro yo vino seguramente a pedirles sobre el traje anti-radiación. Pero ahora, tienen una misión que yo les pediré con los minutos que me quedan.
Albert y Karla se miraron. G parecía tener un dolor de cabeza.
—Deben hablar con Alex, sé que en su línea los andará buscando. Alex tiene la habilidad de volar, y más importante aún, está John. Él es la clave de todo esto, Karla, Albert. Su habilidad es absorber otras habilidades y utilizarlas cuando pueda con tan solo pensarlo. Deben mantener a John a salvo. Lo perdimos y esto causó que todo terminara. Ambos saben lo que sucede, y están dispuestos a detenerlos.
Karla tomó el lugar para preguntar sobre sus habilidades, si hay algo más profundo en ellas que pueda servir para lo que se viene.
—Las habilidades, Karla, vienen de nuestros genes. Para tener la habilidad de la otra persona, debes perder tu alma: abrir su cráneo y mirar dentro de su cerebro. Simplemente así es como vilmente robaban las habilidades. Hay muchas habilidades, pero las más importantes son las cuales te permiten sobrevivir, como la regeneración de G aquí presente, o la de absorber de John, y las ofensivas, como la telequinesis. Si logran contactar al profesor, estoy seguro de que él les podrá dotar de habilidades si las necesitan. Aunque es algo tormentoso, puesto que sientes que te apoderas y algo vive dentro de tí, y no es tuyo. La habilidad de G es vital, puede resistir cualquier cosa y la única manera de dejarlo inconciente es clavando algo en su cerebro, pero al momento de sacarlo, volverá a regenerarse. Y la manera de matarlo, es robandole su habilidad o dandole muerte mediante ahogo, negándole el oxígeno. Eso servirá para que mantegan a este pájaro a salvo.
—¿Y cómo detendremos al hombre bomba? —preguntó Albert.
—Deben llegar a él cuando esté en medio del Wall Street y robar su habilidad. Quedan tres días, desde su fecha. Eso la detendrá y evitará todo esto, pero para eso necesitan alguien que resista, y algo que lo proteja. ¡Y para defenderse, van a necesitar de John, por eso es importante que busquen a Alex! Estoy seguro de que los estará esperando, búsquenlo en New York, en el Empire State mañana. Me tengo que ir, chicos.
Todo estaba en silencio.
Trek se acercó a Albert, y apoyó la mano en su hombro, mientras los observaba a los tres.
—Me alegro de que estés con vida, Albert, y me alegra volver a verte, Karla, y a tí también, pájaro —le dijo a G— pero esto es vital, no podemos fallar. ¿Está bien? Porque si lo hacemos... —Trek rió— solamente te diré lo mismo que nos dijiste antes de morir, Albert.
—¿Qué cosa?
—¿Están dispuestos a ser héroes?
Al final, solamente tres quedaban en la habitación. Albert, Karla y G. Trek se había ido.
Albert mencionó lo de la bomba. Karla y G se quedaron en silencio. No era incómodo, si no era la afirmación de que necesitaban, de alguna forma, conseguir la mayor información posible.
Albert decidió usar sus poderes para investigar, y logró encontrar la información que necesitaba en la NSA. Se trataba de una investigación de hace dos años, en la cual se investigaba el genoma humano en el cual se encontraron mutaciones, y entre ellos aparecía el científico el cual también la llevaba y vivía en San Francisco. Finalmente, el científico decidió dejarlo y dedicarse a la educación, pero la información no era clara en el asunto. Albert indagó más aún, y encontró lo que buscaba, el profesor dejó la investigación por el objetivo de esta: encontrar el método de adquirir la habilidad genética de otra persona, con la meta de lograr crear personas así para trabajar para el gobierno. Según el artículo, al científico le pareció una grosería, ya que para adquirir una habilidad, la persona debía estar muerta y ser investigado el cerebro. Aún así, al parecer, el científico había seguido sus investigaciones genéticas en la universidad y había sido constantemente vigilado por el gobierno. Lamentablemente, no pudo tener más información, ya que al parecer el profesor y científico no usaba la web para mantenerse al tanto, la había dejado.
Mientras, G respondía las dudas de Karla.
—¡No sé nada más, Karla! Solamente vine aquí por un trabajo, sé de mi poder hace un tiempo. Han estado persiguiéndonos, eso lo sé, puesto que antes que viniera aquí estuve en riesgo. Pero pensé que había acabado, al parecer, estaba equivocado.
Karla indagó aún más.
—Te puedo decir que tienen dinero y recursos. Los suficiente para saber todo sobre nosotros, pero no sé lo que realmente buscan.
Aunque gracias a su investigación, Albert ya lo sabía. Aunque para ambos, aún quedaban ciertas partes confusas.
G respondió ante la pregunta de Karla sobre habilidades.
—Lo siento, soy el único hasta el momento. No he conocido a nadie más con una habilidad como la mía.
Pero antes de poder responder la última pregunta de Karla, G, sorprendido le comentó si conocían a la persona que estaba ahí. Karla y Albert, atemorizados, hicieron un paso atrás ante la nueva presencia, hasta que notaron que era Trek.
—¿Trek? —le dijo Albert— volvemos a encontrarnos.
Karla, en silencio, le observaba. Dio un paso adelante, e inteligentemente le ofreció la mano. Trek le sonrió y la estrechó.
—Siempre tan inteligente, Karla —mencionó.
Karla, mediante esta técnica pudo recorrer absolutamente toda la vida de Trek. Su hermana, Skov, su vida de adolescente y la actualidad cuando apenas tenía quince años, sus problemas con los padres, sus discusiones y pudo presenciar cómo New York era destruído. Cada segundo de su vida, lleno de amarguras y dolor. También se conoció a sí misma, se pudo ver desde la otra perspectiva, cuando Trek la saluda y cómo ambos desarrollan una amistad en medio del caos de New York. También conoció el mundo del futuro: ese mundo en el cual los héroes eran terroristas, y eran perseguidos por la gente, siendo culpados por la muerte del 0,07% de la población mundial. Karla ahora podía recordar cualquier cosa sobre Trek.
—¿Por qué volviste? —preguntó Albert.
—No he vuelto —respondió— fue otro yo quien lo hizo, en otra línea temporal seguramente. Vine aquí porque mi propio yo me lo pidió. Según entiendo, aún el día de New York no sucede, y aún Karla ni tú me conocen. Pero yo los conozco, Albert, sé que Karla ahora sabe todo sobre mí.
—¿Te puedes quedar? —Karla había visto que Trek tenía algunos problemas, luego del día de New York, para realizar los viajes. No entendía la razón, pero al parecer, algunas habilidades se habían debilitado luego de ésto.
—Sí, puedo hacerlo —le dijo a Karla, mientras avanzaba y saludaba a G, estrechandole la mano— sé quién eres, y te deseo lo mejor.
Karla había visto que en la línea de "ese" Trek, G se había sacrificado, había dado su vida para que Trek absorbiera su habilidad y detuviera a lo que era...
—¡¿Qué?! —exclamó Karla— ¡No es una bomba, es una persona!
Albert la miró, perplejo, mientras G parecía cada vez más confudido.
—¿Qué significa eso? —preguntó G.
—Sé que lo sabes, Karla, pero quiero explicárselos de todas formas. Te ahorraré el tiempo de hacerlo a Albert, y cualquier pregunta sobre mí, mi futuro, o alguna habilidad, la podrás hacer a tu memoria. En mí línea temporal, que es extremadamente similar a la suya, todos fuimos traídos por el profesor de San Francisco. Pero al parecer, eso no sucederá. El nos explicó el por qué de nuestras habilidades, cosa que ustedes deben saber ya, y de cómo mirando el cerebro de otro se puede adquirir. El gobierno ha estado atrás de la gente con habilidades por años, han estado sobreviviendo entre nosotros, mientras son cazados por ellos. El profesor no estaba de acuerdo y se alejó con la iniciativa, y nos ayudó a nosotros. Nos contó todo, y estuvimos preparados. El atentado del hombre bomba, es un cautivo de ellos, un hombre que no llegué a conocer —argumentó— pero tiene la habilidad de ser radioactivo. Para hacerlo enojar, asesinaron a su esposa al frente de él, causando finalmente una explosión enorme, que no fuimos capaz de detener. No teníamos a G, había sido cazado por los del gobierno, y Albert... había también caído. Karla, Skov y yo eramos los últimos, y nos prometimos que intentaríamos rehacer todo esto, volver al pasado, pero luego de que todo sucedió nos dimos cuenta de que era imposible. No había salvación para nosotros, pero sí para ustedes. Ahora, estoy solo. En el futuro, perdí comunicación con todos los demás hace años. Las personas con habilidades son buscadas, la gente las odia, puesto que cree que ellos fueron los causantes de esto. El gobierno sabía que nosotros eramos una revolución y tenían que detenernos antes de que comenzara. Un otro yo vino seguramente a pedirles sobre el traje anti-radiación. Pero ahora, tienen una misión que yo les pediré con los minutos que me quedan.
Albert y Karla se miraron. G parecía tener un dolor de cabeza.
—Deben hablar con Alex, sé que en su línea los andará buscando. Alex tiene la habilidad de volar, y más importante aún, está John. Él es la clave de todo esto, Karla, Albert. Su habilidad es absorber otras habilidades y utilizarlas cuando pueda con tan solo pensarlo. Deben mantener a John a salvo. Lo perdimos y esto causó que todo terminara. Ambos saben lo que sucede, y están dispuestos a detenerlos.
Karla tomó el lugar para preguntar sobre sus habilidades, si hay algo más profundo en ellas que pueda servir para lo que se viene.
—Las habilidades, Karla, vienen de nuestros genes. Para tener la habilidad de la otra persona, debes perder tu alma: abrir su cráneo y mirar dentro de su cerebro. Simplemente así es como vilmente robaban las habilidades. Hay muchas habilidades, pero las más importantes son las cuales te permiten sobrevivir, como la regeneración de G aquí presente, o la de absorber de John, y las ofensivas, como la telequinesis. Si logran contactar al profesor, estoy seguro de que él les podrá dotar de habilidades si las necesitan. Aunque es algo tormentoso, puesto que sientes que te apoderas y algo vive dentro de tí, y no es tuyo. La habilidad de G es vital, puede resistir cualquier cosa y la única manera de dejarlo inconciente es clavando algo en su cerebro, pero al momento de sacarlo, volverá a regenerarse. Y la manera de matarlo, es robandole su habilidad o dandole muerte mediante ahogo, negándole el oxígeno. Eso servirá para que mantegan a este pájaro a salvo.
—¿Y cómo detendremos al hombre bomba? —preguntó Albert.
—Deben llegar a él cuando esté en medio del Wall Street y robar su habilidad. Quedan tres días, desde su fecha. Eso la detendrá y evitará todo esto, pero para eso necesitan alguien que resista, y algo que lo proteja. ¡Y para defenderse, van a necesitar de John, por eso es importante que busquen a Alex! Estoy seguro de que los estará esperando, búsquenlo en New York, en el Empire State mañana. Me tengo que ir, chicos.
Todo estaba en silencio.
Trek se acercó a Albert, y apoyó la mano en su hombro, mientras los observaba a los tres.
—Me alegro de que estés con vida, Albert, y me alegra volver a verte, Karla, y a tí también, pájaro —le dijo a G— pero esto es vital, no podemos fallar. ¿Está bien? Porque si lo hacemos... —Trek rió— solamente te diré lo mismo que nos dijiste antes de morir, Albert.
—¿Qué cosa?
—¿Están dispuestos a ser héroes?
Al final, solamente tres quedaban en la habitación. Albert, Karla y G. Trek se había ido.
Skov (Residencia: New York)
Spoiler:
La tienda parecía una locura, y es que estaba inundada en colores extraños y un ambiente fúnebre. Era un pequeño bazar, escondido entre el concreto de New York. La tienda espiritual estaba repleta de bolas mágicas que parecían contener universos dentro de ellas, luces que que parecían no iluminar y velas derretidas. En el centro, había un viejo. No lo esperabas. Pensabas que se trataría de una bruja, con un lunar gigante y peludo, pero no. Era un señor de edad, con los ojos ciegos de un color blanco y la piel extremadamente oscura. Había un asiento, unas cartas, una bola y él meditando.
—¿Qué trae a una jovencita de tan lejos a New York? —el anciano te preguntó.
—Solamente ando buscando una tienda —respondiste fríamente.
El anciano parecía observarte, aunque fuera imposible.
—¿Por qué no te doy una lectura gratis? Siento que haz recorrido demasiado buscando respuestas.
Lo pensaste bien, podría ser una locura. Pero lo hiciste de todas formas. ¿Por qué no?
Te sentaste, mientras observabas las cosas extrañas, y las más normales, como los collares y anillos con figuras extrañas.
El vejete te tomó la mano, y puso sobre ella una carta. Te pidió que la leyeras, decía algo de tiempo prestado, no tomaste mucha atención, pero el viejo pareció tener una visión.
—Te veo en el Empire State, veo a más gente también. Veo, veo, veo... esto es imposible.
—¡Obviamente! —respondiste— usted está ciego. No puede ver.
—¡Veo habilidades extrañas! —te quedaste en silencio— y veo también gente atacándote. Muchacha, debes tener cuidado.
"¡Este viejo está loco!" pensaste, pero no te lo podías negar. Necesitabas saber si era verdad, usaste tu habilidad para ver sus pensamientos y con tus propios ojos, fuiste capaz de ver la batalla, a la gente que el viejo nombraba, y viste el Empire State. Era una batalla campal.
—Debes hacerlo —dijo el viejo.
—¿Por qué? —preguntaste.
Pudiste ver en su mente, el recuerdo de una visión. Como New York explotaba a las manos de un hombre. Un hombre bomba, pero era demasiado corto.
—¡Ellos sabrán responder tus preguntas!
Retrocediste. Este vejete estaba loco. No entendías cómo alguien podría tener la habilidad de ver eso, aunque no te parecería extraño. Decidiste salir, sin decir nada.
—¡Oye, aún no me has pagado, ladrona! —gritó el viejo— ¡Puedes conseguir una moto cerca del Empire State, también, pero tendrás que caminar muchas cuadras!
¿Qué harías? El viejo te había dado, de todas formas, tu respuesta. Cuando salías, te susurró que apenas tenías un día, antes que todos se encontraran ahí. Tendrías que ayudar. ¿Estás dispuesta a hacerlo?
—¿Qué trae a una jovencita de tan lejos a New York? —el anciano te preguntó.
—Solamente ando buscando una tienda —respondiste fríamente.
El anciano parecía observarte, aunque fuera imposible.
—¿Por qué no te doy una lectura gratis? Siento que haz recorrido demasiado buscando respuestas.
Lo pensaste bien, podría ser una locura. Pero lo hiciste de todas formas. ¿Por qué no?
Te sentaste, mientras observabas las cosas extrañas, y las más normales, como los collares y anillos con figuras extrañas.
El vejete te tomó la mano, y puso sobre ella una carta. Te pidió que la leyeras, decía algo de tiempo prestado, no tomaste mucha atención, pero el viejo pareció tener una visión.
—Te veo en el Empire State, veo a más gente también. Veo, veo, veo... esto es imposible.
—¡Obviamente! —respondiste— usted está ciego. No puede ver.
—¡Veo habilidades extrañas! —te quedaste en silencio— y veo también gente atacándote. Muchacha, debes tener cuidado.
"¡Este viejo está loco!" pensaste, pero no te lo podías negar. Necesitabas saber si era verdad, usaste tu habilidad para ver sus pensamientos y con tus propios ojos, fuiste capaz de ver la batalla, a la gente que el viejo nombraba, y viste el Empire State. Era una batalla campal.
—Debes hacerlo —dijo el viejo.
—¿Por qué? —preguntaste.
Pudiste ver en su mente, el recuerdo de una visión. Como New York explotaba a las manos de un hombre. Un hombre bomba, pero era demasiado corto.
—¡Ellos sabrán responder tus preguntas!
Retrocediste. Este vejete estaba loco. No entendías cómo alguien podría tener la habilidad de ver eso, aunque no te parecería extraño. Decidiste salir, sin decir nada.
—¡Oye, aún no me has pagado, ladrona! —gritó el viejo— ¡Puedes conseguir una moto cerca del Empire State, también, pero tendrás que caminar muchas cuadras!
¿Qué harías? El viejo te había dado, de todas formas, tu respuesta. Cuando salías, te susurró que apenas tenías un día, antes que todos se encontraran ahí. Tendrías que ayudar. ¿Estás dispuesta a hacerlo?
Nio (Residencia: San Francisco)
Spoiler:
—Gracias por ayudarme, Nio, necesitaba alguien en quien confiar. Pero antes que vayamos, quiero contarte la verdad. Yo trabajaba con el gobierno, descubriendo gente con habilidad pero ellos querían que estas personas trabajaran para ellos. No fui capaz de aguantarlo, y los dejé, me robaron mi investigación pero mi mejor amigo, un neurocientífico, me pasó en secreto algunos cerebros, intactos, de personas que tenían habilidad. Sé que tienes un don, Nio, y debes ayudarme a detenerlos. Pero no puedo pedirlo sin darte algo de mi parte, una habilidad, que te ayudará a combatirlos. Vamos a la guerra, Nio, y estoy seguro de que no seremos los únicos que lucharemos. Intentan acabar con ustedes, intentan hacerlos culpables de una bomba, y mañana, en el Empire State, deberán defender lo que es suyo.
Nio estaba perpleja. Entendía, por fin, muchas cosas más. El profesor le señaló para que le siguiera, y así lo hizo. Recorrieron algunos pasillos inhabitados de la Universidad, y finalmente llegaron a una sala helada, con cerebros.
—¡¿Són de personas?! —Nio gritó, asustada.
—La mayoría de ellos son héroes —le dijo el profesor— este es mi mayor secreto, puesto que aquí hay distintas habilidades. No las tomé yo, no las necesito, estoy viejo ya. Pero tú, en cambio, Nio, eres joven y lo suficientemente inteligente para detenerlos, ayudar, ser parte de todo esto. Sé que es muy pronto, sé que esto es repentino, pero el mundo te necesita.
La sala estaba helada, refrigerandose, mientras Nio cruzaba los brazos, el profesor le mostró un cerebro, cubierto por una tela negra.
—Yo no lo puedo observar, Nio, pero tu sí. Este cerebro contiene la invisibilidad, una habilidad de un héroe que dio su vida para mantenerla a salvo. Ahora, necesito que observes el cerebro, y veas lo que hay dentro de él.
A Nio parecía repugnante, pero de todas formas lo hizo. Levantó la tela, y miró el cerebro, aterorrizada, pero de pronto fue capaz de ver más allá. Sintió como su cuerpo sudaba, como su mente cambiaba y pudo ver cómo el poseedor de la habilidad, había perdido su vida, suicidándose. Luego, sintió como dentro de su propio cuerpo, había algo que no le pertenecía. Algo sucio. Como si lo hubieran recorrido, retrocedió y el cerebro cayó al suelo y el líquido que lo mantenía se expandió. Sintió ganas de llorar.
—Lo siento, Nio, pero sabía que si te comentaba lo que sucedía con esto, no lo harías. Ahora, solamente debes desear usas la invisibilidad, y podrás hacerlo. Me llevaré todos conmigo a New York, debemos ir al Empire State mañana.
Ambos, después de unos minutos empacando las cosas a toda la velocidad, se subieron al avión y volaron. El viaje se realizó sin problemas, pero aún quedaba tiempo.
¿Qué debían hacer en New York, antes de enfrentarse en el Empire State?
(Tienes rato libre, Nio, para visitar algún lugar en el que quieras ir a buscar algo, como por ejemplo, armas, antes de enfrentarte a el enemigo)
Nio estaba perpleja. Entendía, por fin, muchas cosas más. El profesor le señaló para que le siguiera, y así lo hizo. Recorrieron algunos pasillos inhabitados de la Universidad, y finalmente llegaron a una sala helada, con cerebros.
—¡¿Són de personas?! —Nio gritó, asustada.
—La mayoría de ellos son héroes —le dijo el profesor— este es mi mayor secreto, puesto que aquí hay distintas habilidades. No las tomé yo, no las necesito, estoy viejo ya. Pero tú, en cambio, Nio, eres joven y lo suficientemente inteligente para detenerlos, ayudar, ser parte de todo esto. Sé que es muy pronto, sé que esto es repentino, pero el mundo te necesita.
La sala estaba helada, refrigerandose, mientras Nio cruzaba los brazos, el profesor le mostró un cerebro, cubierto por una tela negra.
—Yo no lo puedo observar, Nio, pero tu sí. Este cerebro contiene la invisibilidad, una habilidad de un héroe que dio su vida para mantenerla a salvo. Ahora, necesito que observes el cerebro, y veas lo que hay dentro de él.
A Nio parecía repugnante, pero de todas formas lo hizo. Levantó la tela, y miró el cerebro, aterorrizada, pero de pronto fue capaz de ver más allá. Sintió como su cuerpo sudaba, como su mente cambiaba y pudo ver cómo el poseedor de la habilidad, había perdido su vida, suicidándose. Luego, sintió como dentro de su propio cuerpo, había algo que no le pertenecía. Algo sucio. Como si lo hubieran recorrido, retrocedió y el cerebro cayó al suelo y el líquido que lo mantenía se expandió. Sintió ganas de llorar.
—Lo siento, Nio, pero sabía que si te comentaba lo que sucedía con esto, no lo harías. Ahora, solamente debes desear usas la invisibilidad, y podrás hacerlo. Me llevaré todos conmigo a New York, debemos ir al Empire State mañana.
Ambos, después de unos minutos empacando las cosas a toda la velocidad, se subieron al avión y volaron. El viaje se realizó sin problemas, pero aún quedaba tiempo.
¿Qué debían hacer en New York, antes de enfrentarse en el Empire State?
(Tienes rato libre, Nio, para visitar algún lugar en el que quieras ir a buscar algo, como por ejemplo, armas, antes de enfrentarte a el enemigo)
Alex (Residencia: New York)
Spoiler:
En el avión, todo parecía normal y no hubo ningún peligro. Pero John mencionó algo sobre el Empire State.
—Decía algo ahí de tener planeado mañana, algo sobre algunas personas con habilidades, Alex. Necesitamos ir ahí, estoy seguro de que encontraremos a más personas ahí.
—¿Estás seguro? —preguntó Alex.
—Sí, algo el gobierno planeó y necesitamos detenerlos. Es nuestro deber. ¿No lo crees?
—Para algo se nos dio nuestra habilidad —comentó Alex, mientras llamaba a la azafata para tomar un vaso de jugo.
Ambos, en silencio, esperaban llegar a New York. Cuando lo hicieron, tomaron un taxi, sufriendo la larga espera de las calles, y llegaron al Empire State. Subieron mediante el ascensor y les pareció una eternidad, estaba repleto de gente, la mayoría turistas, pero alguna extraña, más que los demás. Eran los primeros en llegar, al parecer, a la sima, puesto que quedaba un día para lo que John había descrito como una batalla.
—No necesitamos buscarlos, ellos vendrán, estoy seguro —dijo John, mientras observaban a la gran ciudad.
Alex miraba cómo se iba oscureciendo.
—¿Crees que debamos ir a buscar algo, ahora que tenemos tiempo?
(Tienes tiempo como por ejemplo, ir a buscar armas u otra cosa útil a la tienda, pero tendrán que volver mañana al lugar, así que usa bien el tiempo)
—Decía algo ahí de tener planeado mañana, algo sobre algunas personas con habilidades, Alex. Necesitamos ir ahí, estoy seguro de que encontraremos a más personas ahí.
—¿Estás seguro? —preguntó Alex.
—Sí, algo el gobierno planeó y necesitamos detenerlos. Es nuestro deber. ¿No lo crees?
—Para algo se nos dio nuestra habilidad —comentó Alex, mientras llamaba a la azafata para tomar un vaso de jugo.
Ambos, en silencio, esperaban llegar a New York. Cuando lo hicieron, tomaron un taxi, sufriendo la larga espera de las calles, y llegaron al Empire State. Subieron mediante el ascensor y les pareció una eternidad, estaba repleto de gente, la mayoría turistas, pero alguna extraña, más que los demás. Eran los primeros en llegar, al parecer, a la sima, puesto que quedaba un día para lo que John había descrito como una batalla.
—No necesitamos buscarlos, ellos vendrán, estoy seguro —dijo John, mientras observaban a la gran ciudad.
Alex miraba cómo se iba oscureciendo.
—¿Crees que debamos ir a buscar algo, ahora que tenemos tiempo?
(Tienes tiempo como por ejemplo, ir a buscar armas u otra cosa útil a la tienda, pero tendrán que volver mañana al lugar, así que usa bien el tiempo)
Will (Residencia: En el avión)
Spoiler:
En medio del avión, la gente miraba aterrorizada, alejandose lo más posible de la posición en que tu y Preston se encontraban. El enemigo, al frente tuyo, era una chica con una mirada malévola. Rubia, hermosa, pero era atemorizante. En la mano de la chica, había fuego. Fuego. Llamas. Era sofocante y estaba poniendo en riesgo la vida de todos al hacerlo dentro del avión. Nadie sabía qué hacer. Las azafatas intentaban mantener a la gente a salvo, mientras la chica te observaba.
—Así que no llegaste a tiempo, ¿no? —te dijo.
Preston miraba atónito.
—¡¿Qué es lo que quieres?! —gritaba.
—Sus habilidades —afirmó la chica y dio un paso adelante— si no hubieran gastado tiempo, haciendo estupideces, probablemente no estaríamos aquí. Sé lo que haces, Will —dijo— pero en el avión, no hay nada que puedas hacer.
—Estaba escondido —dijo Will.
—Cariño, no hay lugar para esconderse aquí —exclamó.
Toda la gente, no entendía absolutamente nada.
—No puedo hacer nada, Will —dijo Preston— no sirvo para nada...
—No deberías gastar tu potencial en ellos —dijo la rubia— no soy de mostrar misericordia. Pero podrías unirte a nosotros.
—¡Jamás, perra! —gritó Preston.
La mujer lanzó llamas, pero Will usando la tierra que tenía logró extinguirlas, pero Will supo que el oxígeno terminaría acabandose si seguía así. La mujer, furiosa, lanzaba llamas con locura, quemando todo a su alrededor, sin importar quienes fueran, mujeres, niños, no había clasificación.
Will tendría que buscar una forma de salir de ésta, y debería hacerlo rápido, antes que la mujer en llamas consumiera la última existencia dentro de ese avión.
—Así que no llegaste a tiempo, ¿no? —te dijo.
Preston miraba atónito.
—¡¿Qué es lo que quieres?! —gritaba.
—Sus habilidades —afirmó la chica y dio un paso adelante— si no hubieran gastado tiempo, haciendo estupideces, probablemente no estaríamos aquí. Sé lo que haces, Will —dijo— pero en el avión, no hay nada que puedas hacer.
—Estaba escondido —dijo Will.
—Cariño, no hay lugar para esconderse aquí —exclamó.
Toda la gente, no entendía absolutamente nada.
—No puedo hacer nada, Will —dijo Preston— no sirvo para nada...
—No deberías gastar tu potencial en ellos —dijo la rubia— no soy de mostrar misericordia. Pero podrías unirte a nosotros.
—¡Jamás, perra! —gritó Preston.
La mujer lanzó llamas, pero Will usando la tierra que tenía logró extinguirlas, pero Will supo que el oxígeno terminaría acabandose si seguía así. La mujer, furiosa, lanzaba llamas con locura, quemando todo a su alrededor, sin importar quienes fueran, mujeres, niños, no había clasificación.
Will tendría que buscar una forma de salir de ésta, y debería hacerlo rápido, antes que la mujer en llamas consumiera la última existencia dentro de ese avión.
Trek (Residencia: En un cybercafé en New York)
Spoiler:
Fue como una bofetada con un guante de goma cuando te diste cuenta que perfectamente podías usar tus habilidades, ir al futuro y averiguar de qué se trataba todo eso. Tus ojos parecían de chino mojado, porque forzaste la vista y cuando te diste cuenta, estabas en el futuro. ¿Cuál futuro? Ni idea, pero debía ser uno muy cercano, estabas en lo que solía ser el Empire State, reducido a escombros y paredes quemadas. No había nadie, solo tú y el papel que debías entregarle a Karla.
—¿Qué buscas? —te preguntó una mujer, que salió entre la oscuridad del edificio y parecía más anciana de lo que debía ser.
—No sabía cuándo ocurrió esto.
—¿En qué mundo vives, muchacho? Fueron esos raros que hicieron esto, ahora, todos los odian. Esos criminales. Son unos terroristas.
—¿Conoce usted algunos?
—Gracias a dios no, pero si lo hiciera, no dudaría en denunciarlo. Esos villanos son sentenciados a muerte, después de lo que nos hicieron. Al país, a las familias, nos dejaron débiles.
Volviste. En el futuro, los héroes eran considerados peligro nacional y si no detenían la bomba, ese sería el futuro que a esta línea le quedaba.
Después de buscar en internet, encontraste el domicilio de Albert, un famoso ingeniero de Manhattan. Anotaste la dirección.
El mundo...
¿Tenías las agallas para cambiarlo?
—¿Qué buscas? —te preguntó una mujer, que salió entre la oscuridad del edificio y parecía más anciana de lo que debía ser.
—No sabía cuándo ocurrió esto.
—¿En qué mundo vives, muchacho? Fueron esos raros que hicieron esto, ahora, todos los odian. Esos criminales. Son unos terroristas.
—¿Conoce usted algunos?
—Gracias a dios no, pero si lo hiciera, no dudaría en denunciarlo. Esos villanos son sentenciados a muerte, después de lo que nos hicieron. Al país, a las familias, nos dejaron débiles.
Volviste. En el futuro, los héroes eran considerados peligro nacional y si no detenían la bomba, ese sería el futuro que a esta línea le quedaba.
Después de buscar en internet, encontraste el domicilio de Albert, un famoso ingeniero de Manhattan. Anotaste la dirección.
El mundo...
¿Tenías las agallas para cambiarlo?
Sophie (Residencia: En la NYU)
Spoiler:
—Me puedes decir Jay, como Jay-z —se hechó a reir.
Lo quedaste mirando perpleja.
—Bueno, Jay, cuéntame lo que sabes.
—Trabajaba para el gobierno, encontrando gente con habilidades, como tú. Sé como tratar con ellos. Pero era falso, en realidad, solamente seguía mis propios ideales, pero ahora estos imbéciles harán explotar una bomba en tres días, chica. Tres días quedan corazón para que toda esta mierda explote. Y mañana, los imbéciles harán un pre calentamiento en el Empire State, y si lo logran, podrán destruir toda esta mierda.
Quedaste perpleja. ¿Qué harías?
—Oye, corazón, te puedo ayudar a lo que sea. Aún queda un día, y nos dirijimos allá. ¿Está bien?
Lo quedaste mirando perpleja.
—Bueno, Jay, cuéntame lo que sabes.
—Trabajaba para el gobierno, encontrando gente con habilidades, como tú. Sé como tratar con ellos. Pero era falso, en realidad, solamente seguía mis propios ideales, pero ahora estos imbéciles harán explotar una bomba en tres días, chica. Tres días quedan corazón para que toda esta mierda explote. Y mañana, los imbéciles harán un pre calentamiento en el Empire State, y si lo logran, podrán destruir toda esta mierda.
Quedaste perpleja. ¿Qué harías?
—Oye, corazón, te puedo ayudar a lo que sea. Aún queda un día, y nos dirijimos allá. ¿Está bien?
Ahí tienen cochinos. Tienen cinco días para responder.
[MENTION=41932]Nio.[/MENTION] [MENTION=47065]Captain Rakhan[/MENTION] [MENTION=57495]Skov[/MENTION] [MENTION=27474]Teos[/MENTION] [MENTION=4878]Overly.[/MENTION] [MENTION=58406]quiqueenri[/MENTION] [MENTION=25548]Poke*planta[/MENTION]
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